El delito de homicidio involuntario a menudo se confunde con homicidio o asesinato, pero hay elementos muy diferentes que componen los cargos por estos delitos. Una persona que es acusada de homicidio involuntario en primer grado se enfrenta a un cargo de delito grave de Clase B. El delito de homicidio involuntario en segundo grado se acusa como un delito grave de Clase C.
Si el homicidio involuntario es acusado como un delito agravado, entonces las clases de delito grave siguen siendo las mismas para los cargos de primer y segundo grado. Una persona que es condenada por el delito de homicidio involuntario puede enfrentar una sentencia de uno a tres años de prisión, así como multas. Sin embargo, la sentencia puede llegar hasta 25 años, dependiendo de las circunstancias y la clase de delito grave.
Para los delitos de homicidio involuntario, hay mínimos obligatorios para el período de encarcelamiento. Con el fin de minimizar las sentencias potencialmente graves, es importante contratar a abogados de defensa criminal eficaces y bien informados.
Los expertos abogados de Greco Neyland, PC cuentan con años de experiencia como abogados defensores, pero también se basan en los conocimientos que los miembros fundadores adquirieron en sus primeras carreras como fiscales para elaborar una defensa sólida.
Según la legislación de Nueva York, hay ocho delitos diferentes que entran dentro de la clasificación de homicidio involuntario u homicidio por negligencia criminal, entre los que se incluyen:
Cualquier crimen que involucra la muerte de una persona lleva a un escrutinio cuidadoso de los hechos para determinar que cargos, si alguno, son requeridos. La severidad de la ofensa es determinada por las circunstancias únicas de la muerte. Sin embargo, incluso si un caso se presenta como un cargo de homicidio involuntario en lugar de asesinato, las penas son severas.
Si bien hay muchos escenarios de hechos diferentes que pueden conducir a un cargo de homicidio involuntario, uno de los cargos comunes es el homicidio involuntario en segundo grado cuando una persona causa la muerte de otra persona después de mostrar indiferencia imprudente al riesgo de daño a los demás en la elección de actuar de una manera específica.
Una persona puede ser acusada de homicidio involuntario en segundo grado si actúa a sabiendas de manera imprudente, con indiferencia intencionada al potencial de daño grave que las acciones suponen para otras personas.
Para satisfacer este elemento, la persona debe haber actuado de una manera diferente a la que habría actuado una persona razonable en circunstancias iguales o similares. Sin embargo, este delito no requiere una intención específica de hacer daño.
La distinción es un poco confusa, pero básicamente, el delito se basa en alegaciones de que la persona no tenía intención de hacer daño, pero no se preocupó lo suficiente por el riesgo de daño potencial de lesiones corporales graves o muerte a otros como para comportarse de otra manera. Se trata de un delito grave por el que la persona puede pasar hasta 15 años en prisión.
Existen defensas eficaces que pueden utilizarse para contrarrestar las alegaciones del fiscal en los casos de homicidio involuntario. La acción que condujo a la acusación de homicidio involuntario en Nueva York puede haber sido involuntaria, puede no haber implicado ninguna imprudencia temeraria, puede haberse hecho en defensa propia o puede no haberse hecho en absoluto en caso de error de identidad.
Además, los abogados defensores experimentados pueden ser capaces de impugnar la admisibilidad de las pruebas que se obtuvieron ilegalmente o en violación de los derechos del acusado. Mientras que los tipos de defensas pueden variar, lo que no cambia es la necesidad de encontrar los abogados adecuados.
Cuando un crimen involucra la muerte de otro individuo, es crucial tomar los cargos seriamente. Los hábiles abogados penalistas de Greco Neyland, PC, en la ciudad de Nueva York, están listos para ponerse a trabajar a su favor tan pronto como usted pueda venir a hablar con nosotros sobre su caso. No tememos enfrentarnos a los fiscales de Manhattan para obtener el resultado correcto para sus clientes.
Además, no nos preocupa llevar el caso a juicio y no recomendaremos un acuerdo injusto sólo para cerrar un caso. Nuestro trabajo es asegurarnos de que sus mejores intereses son atendidos y usted no está arruinado por estos cargos.
Llámenos al (212) 951-1300 para programar una consulta inicial gratuita para que podamos aprender acerca de los cargos que enfrenta. Tenemos oficinas en Manhattan y White Plains, Nueva York con el fin de proporcionar un fácil acceso para nuestros clientes, así como la proximidad a los tribunales.
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